lunes, diciembre 26, 2005

Ni en mis peores pesadillas...

Mal actor, pero peor ¿cantante? Si tenéis el Quicktime instalado, pulsad sobre el título del post y que los dioses de Kobol se apiaden de vosotros...

Maldades navideñas 5

Os habéis preguntado alguna vez: ¿existe alguna película (concretemos: telefilm) en el que los protagonistas sean los Reyes Magos y no Papá Noël/Santa Claus/el barbudo de la Coca-Cola? ¿Alguien se ha parado a pensar en el brete en el que se mete a los padres que pretenden mantener la tradición de la Epifanía? O a la gente que, como el que escribe estas líneas, y qué tantas veces ha criticado el consumismo, cae a pie juntillas en el mismo y, embocapequeñecido, se dedica a devanarse las meninges y compra regalos a sus seres más queridos, pero resulta ser un vago recalcitrante, le aburre salir de tiendas y el 6 de enero le concede un plazo un poco menos ajustado que el 25 de diciembre.

En definitiva: ¿tendrán los padres que hacer dos tandas de regalos? Los niños, ¿no se preguntarán por qué Papá Noël se adelanta a los reyes? ¿Y por qué no está en el belén? ¿No lo creerán más cierto que los Magos de Oriente, porque portagoniza esas (por otra parte, infumables) películas de media tarde en todas las televisiones públicas?

miércoles, diciembre 21, 2005

Maldades navideñas 4

Felicidades.

Ahora lo digo en serio: hace apenas un par de horas que ha entrado el invierno en este hemisferio, ya falta poco para el año nuevo, y mis muy sinceros deseos de felicidad para esta Navidad, el Año Nuevo, y de aquí al fin de los tiempos, que estos deseos no necesitan renovación ni ITV.

Bueno, también es cierto que a algún descarriado por ahí le deseo... Bien, que escuchen "Pesadilla en el parque de atracciones", de Los Planetas y se apliquen el cuento.

(Por fortuna, en mi caso, conozco a pocos. Aunque alguno sea vecino de escalera...)

Quiero que sepas que ya me esperaba
que esto ocurriera y que no pasa nada,
sólo me da la razón, y que he estado aprendiendo
de cada momento que he estado contigo.
Y pienso aplicar contra mis enemigos
tus tácticas sucias de acoso y derribo,
que también he sacado algo bueno
de todo este enredo.

Y quiero que sepas
que espero que acabes
colgando de un pino
cuando veas lo imbécil que has sido,
cuando veas que lo has hecho fatal.

Y que quiero que sepas
que ha sido un infierno,
estando contigo
el infierno es lo más parecido,
te pareces un poco a Satán.

Quiero que sepas que me he acostumbrado
a tus putas escenas de "ahora me largo".
Lárgate ya de verdad que sería una suerte
si no vuelvo a verte en los próximos años.
Por mí que podías tirarte de un tajo
que ya lo que hagas me trae sin cuidado.
Si me pongo a pensarlo un momento
pcreo que lo prefiero..

Así que ya sabes
que espero que acabes
pegándote un tiro
cuando veas lo imbécil que has sido,
cuando veas que lo has hecho fatal.

Y que quiero que sepas
que ha sido un infierno,
estando contigo
que por poco no acabas conmigo,
pero soy difícil de matar.

Y que quiero que sepas
que ha sido un infierno,
estando contigo
el infierno no es tanto castigo,
te pareces bastante a Satán.

Maldades navideñas 3

Finales de noviembre, y las calles de las ciudades, al menos en estos lares, se engalanan con adornos de múltiples colores que iluminan todos los rincones, se cuelan en los hogares y llenan el ambiente de...

...CO2 y gases invernadero.

martes, diciembre 20, 2005

Maldades navideñas 2

Bueno, más que maldad, travesura. Y quizá ni eso.

Escuchada hasta la saciedad cuando Seguridad Social sacaron el doble en directo Compromiso de amor: "Los pinguinos están helaos". Música: el "Noche de paz". Letra:

Noche de caos
estoy "helao"
diez pingüinos
la han "palmao".

Si no hay pavo
no hay Navidad
si no voy ciego
no puedo cantar
un villancico al Señor
un villancico al Señor

Noche de caos
estoy "helao"
diez "palmaos"
la han "pingüinao".

Sin Navidad
pavo no hay
no lo puedo celebrar
esto es "demasiao"
"tos" los pingüinos "helaos".


Olvidaos de la burra que va a Belén y cantemos todos este villancico en Nochebuena :D

Gigamesh 42

Tuve la oportunidad de leer la revista la semana pasada (mira, ventajas de trabajar de friki).

El primer cuento, "Duelo", de Richard Matheson, en el que se basó Steven Spielberg para su ópera prima El diablo sobre ruedas, sería, aparentemente, la estrella del número. Y Matheson se muestra como el escritor solvente que es: directo, depurado, capaz de asfixiarte en una atmósfera al mismo tiempo cotidiana y espeluznante. Dejadme subrayar cotidiana: para quienes conducimos, aun con poca frecuencia, hemos sufrido esos irresponsables del volante; y todos, en mayor o menor medida, hemos sentido al diablo poseernos cuando el conductor enemigo nos irrita o nos deja en ridículo. El protagonista primero siente el fastidio, después la rabia moderada; posteriormente, como el rey en su coche, se siente autorizado para aplicarle un correctivo al camionero... y el miedo cuando esa agresividad supera la línea que él (y muchos) consideramos el límite, la integridad física, y entonces recordamos que ese límite lo pone cada uno... y puede ser tan caprichoso como un dibujo fractal. El terror de lo cotidiano y la arbitrariedad de la moral humana: realmente desosegante.

Pero pasamos la última página (un final correcto, no demasiado espectacular, en mi opinión), y nos encontramos con "He tocado el cielo", de Mike Resnick. Para mí, el mejor cuento que he leído este año, y eso que han habido muchos y muy buenos. Un cuento que parte de un supuesto original, brillante, y aun así tan rematadamente cercano... Resnick construye dos personajes memorables con los cimientos bien enraizados en los diálogos, y engarza una trama aplastántemente lógica. Una lógica muy humana y, a la vez, tan diferente de la que conocemos.

¿Y la trama? Kirinyaga es un mundo donde los últimos kikuyus aún puros construyen su utopía, intentando deshacerse de cualquier influencia europea. Dentro de la tradición kikuyu, que una niña superdotada intente aprender amenaza el corazón de la utopía. Y, a pesar de admirar la capacidad de la niña, el mago de la tribu tendrá que tomar ciertas decisiones.

Más adelante, "El sumidero de la memoria", también de Resnick, aborda un tema tan delicado como el de la enfermedad del Alzheimer, con una excusa de ciencia ficción que lo emparenta con Flores para Algernon. Delicado, respetuoso, pero pelín edulcorado para mi gusto.

El Desenterrador, de Víctor Jiménez, presenta la biografía de Robert Aickman, del que se presenta el cuento "Qué manita tan fría". Un cuento de terror superado en cuanto a originalidad, excesivo en las manías del autor, pero tan auténtico por estas mismas paranoias que le da un toque encantador.

También hay ensayos que merecen la pena. Pero no quiero hacer publicidad subliminal: a 5,95 euros tan sólo, y la suscripción es barata :D

lunes, diciembre 19, 2005

Maldades de Navidad 1

Los que me conocéis, sabéis que soy una persona pacífica, para nada amante de la violencia...

... aunque, paseando por la calle, me molaría cargar una escopeta al hombro y disparar contra los muñecos de Papá Noël estos que se han puesto de moda, que cuelgan de ventanas y balcones cual rateros de Mortadelo y Filemón.

¿Os imagináis los edificios llenos de muñecos agujereados, con la espuma brotando del costado, de la cabeza, de...?

Ah, las Navidades, que sacan lo mejor de cada uno... :D

domingo, diciembre 18, 2005

Meme musical

En el cuaderno de Alfredo Álamo tropiezo con este meme musical, que para mí viene a ser como cualquier propuesta socialista en conocimiento de Rajoy & Co.: no puedo evitar comentarla :D

Así que ahí van mis preferencias:

Una canción que te emocione hasta las lágrimas:
Unas cuantas, pero de quedarme con una, con la que siempre, siempre lloro, en la estrofa en que la madre rompe a llorar mientras baja las escaleras:
"She's Leaving Home", The Beatles

Una canción de que te ponga a mil (activo, con pilas):
"Deceptacon", Le Tigre
(editando: he encontrado este videoclip amateur del "Deceptacon" en la página web de Le Tigre y me he reído un buen rato. También he incluido el link a la web de Le Tigre, y a unas cuantas más, ahí al ladito, a la derecha de este texto).

Una canción para recordar la mejor época de tu vida, o la peor (la que quieras):
La mejor:
"Dream On", Aerosmith (me recuerda cuando empecé a salir con Nuria)
La peor:
"Sowing the Seeds of Love", Tears For Fears (me ayudó a superar un bache de amores, o sea, la recuerdo y con mucho, mucho cariño). Y los discos de Simple Minds Sparkle in the Rain y Once Upon a Time

¡Venga, hale, hale, que es gerundio: apuntaos al meme!

(Editando: hay tantas buenas canciones que me gustan, y tantas canciones no tan buenas pero que me gustan igual, que algún día las comentaré en una o varias entradas.)

sábado, diciembre 17, 2005

Os juro que yo quería hablar de literatura, no de urbanismo

Pero hay noticias que me sublevan. Más, si tenemos en cuenta que, cuentas en mano, cambiarnos de piso nos va a suponer estrecharnos el cinturón hasta que el ombligo nos abulte en la espalda.

Ni punto de comparación, por otra parte, con la estafa que han sufrido los que nos iban a vender el piso, y que ha dejado todo el proyecto en aguas de borrajas. Por un tiempo más, voy a seguir siendo un eterno aprendiz de Sentmenat.

Volviendo a la noticia, me parto la caja con el siguiente extracto:

El alcalde comentó que el suelo forestal "comportará un importante ahorro en agua para riego" y aclaró que a pesar de que "no hay todavía ningún proyecto de campo de golf sobre la mesa", sí sabe que la empresa constructora Secopsa tiene previsto ejecutar un plan con 1.000 nuevas viviendas y un campo de golf incluido.


Ya, como si el bosque fuese a garantizarles el suministro de agua. ¿Cómo? Para que fuese cierto, la masa forestal tendría que ser mucho más grande. ¿De dónde creen que procede el peligro de desertización de todo el litoral mediterráneo? Exacto: una deforestación insostenible que evita que se retenga la humedad y que, además, hace que la tierra fértil acabe en el mar debido a la erosión. Además de la tierra perdida por urbanización o falsas áreas verdes (no: un campo de golf no encaja en el ecosistema). Aquí sólo cabe incultura, política del avestruz (meto la cabeza en un agujero y no me entero de nada) o mala fe.

Y si nos vamos a la otra punta del país, tenemos esta otra noticia.

En serio, para estar así, hagamos como sugería Bush: acabemos con todos los bosques, echemos una capa de cemento y construyámos a tope. Y aun así, tendremos un alto porcentaje de pisos vacíos por especulación y seguiremos ahogados por las hipotecas.

martes, diciembre 13, 2005

¿Agua para todos?

En el mar de Aral, está claro que no. ¿Quién dijo que unos metros cúbicos menos no se notan? Leed aquí y aquí.

No, no es que esté trazando un paralelismo con la urbanización desaforada de la costa levantina (y lo digo desde Portbou hasta Algeciras, ¿ein?)...

domingo, diciembre 11, 2005

La prioridad de los problemas

Esta semana se difundía por la prensa que uno de cada cinco españoles es pobre.

Y digo yo: y si en vez de tanto desviar la atención a problemas más triviales, como el debate sobre el Estatut (que no se me malinterprete, que yo estoy a favor... siempre y cuando antes se acabe con este problema), la sucesión real (no comments...) o el Mundial de Alemania y las selecciones autonómicas, ¿no es más importante que todo el mundo tenga asegurado tres comidas diarias, una vivienda digna y un trabajo estable?

A rebufo de este problema, ¿os habéis percatado de la cantidad de nuevas empresas de esas que juntan todas tus cuotas en una sola, reduciéndotela hasta la mitad -según prometen-? Como en el caso de las inmobiliarias, si surgen tantas es porque hay negocio. O sea, ganando dinero (y según estas cifras, mucho dinero) a costa de la necesidad de los más pobres.

Insisto: creo que es urgente y necesario priorizar los problemas en este país y, ya que todo el mundo tiene en la boca la Constitución, recordar que garantiza lo siguiente:

Artículo 35
1. Todos los españoles tienen el deber de trabajar y el derecho al trabajo, a la libre elección de profesión u oficio, a la promoción a través del trabajo y a una remuneración suficiente para satisfacer sus necesidades y las de su familia, sin que en ningún caso pueda hacerse discriminación por razón de sexo.


Artículo 47
Todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada. Los poderes públicos promoverán las condiciones necesarias y establecerán las normas pertinentes para hacer efectivo este derecho, regulando la utilización del suelo de acuerdo con el interés general para impedir la especulación.
La comunidad participará en las plusvalías que genere la acción urbanística de los entes públicos.


A mí se me caería la cara de vergüenza si me lo tuviesen que recordar.

Puede parecer una buena noticia

Y quizá lo sea, tal como afirma este comunicado de prensa de Greenpeace.

Pero ahora queda la parte más dura: llevar a cabo los acuerdos de Montreal.

Curiosamente, leyendo el artículo de El País que citaba en el título, la "solución" parece que provendrá más de la iniciativa privada que de las medidas gubernamentales. El primer aviso lo han dado las aseguradoras, que este año han tenido que hacer frente a indemnizaciones muchimillonarias. Y en un sector como es el de las energías renovables, donde las grandes empresas han puesto todas las trabas posibles (y si no, intentad poner paneles de energía solar en vuestras casas; ya veréis lo fácil que os ponen poder "vender" a la red eléctrica los excedentes), hay un gran pedazo de pastel por repartir. A pesar de que algunas sigan con la venda en los ojos de los beneficios inmediatos (que no son más que parches de grandes inversiones en el futuro, cuando se agoten las energías no renovables) y se dedican a torpedear unos acuerdos necesarios. (Otro paréntesis: hay que recordar que se puede escoger proveedor eléctrico. Yo, en cuanto las tarifas de Electra Norte me lo permitan, paso de Endesa.)

Evidentemente, en el negocio de las renovables, quienes partirán con ventaja volverán a ser las grandes empresas, puesto que ya cuentan con grandes infraestructuras, pingües beneficios de décadas vendiendo petróleo y, en algún caso, herederas de tiempos del monopolio. Tiempo al tiempo, y veremos cómo Repsol y BP serán las mayores suministradoras de energía eólica, solar o biomasa.

Pero la pregunta que yo me hago es: ¿llegamos a tiempo?

jueves, diciembre 01, 2005

Según la COPE, seguro que esto es cosa de ERC

Por muchas burradas que seamos capaz de decir, evidentemente, no les quiero ningún mal a estos dos personajes, pero menudo susto que se han llevado.

Y me pregunto yo, el helicóptero, ¿era de los que vendemos a países no demasiado "estables"?

miércoles, noviembre 30, 2005

Esta noche no se pierdan...

Anoche, mientras redactaba el post anterior, vi en la Noche Hache la entrevista que Eva Hache le realizaba a Pablo Carbonell. Y emitieron un extracto del programa que este último presenta, 1 Equipo, en el que le preguntaba a Josep Piqué sobre la extracción de oro en la cuenca asturiana, y la contaminación de sus acuíferos por el uso de cianuro en la limpieza. Y Piqué, a quien tengo por uno de los mejores políticos del país por su saber estar, se sobró con él como pocas veces he visto en la tele a un político faltar a un entrevistador. Dudaba de la veracidad de la información, argumentando que tan solo eran «tres ecologistas» los que vociferaban sobre el tema, y qué credibilidad iban a tener «tres ecologistas» y un «acéfalo» (en palabras del propio Carbonell) si el Estado no había tomado ninguna medida (como si esto fuese un argumento: más bien todo lo contrario. Para ese tipo de agresión por omisión están las organizaciones ecologistas).

Más que el ninguneo al entrevistador, me molestó ese desprecio a las organizaciones que intentan, con pocos medios y tragando bilis, remediar en algo la casa que le vamos a dejar a nuestros nietos. Y si no, ojo al dato. Y preguntémonos, como hico la presentadora ayer, España ¿cumple algún objetivo del Protocolo de Kioto?

Bueno, si podéis, ved el programa esta noche, a eso de las 22:00h y, como en todo, sacad vuestras propias conclusiones.

Mi cita anual con Allen ha sido...

Implacable. Como una tragedia griega. Porque de eso se trata: Allen dispone en Match Point los elementos que establecerán un desenlace inevitable... con un giro final redondo y original que destila ironía y humanidad a partes iguales.

Si en los clásicos se trataba el poder, la venganza, los celos, Allen dirige la mirada a un concepto que destaca mucho más en la sociedad occidental que en la de Homero o Shakespeare, por lo menos en cantidad: el arribismo. Pero no se esperen que en la película de todos los años de este año, la historia reencarne una variación sobre el mismo tema de siempre, las neurosis del neoyorquino proyectadas en los personajes. En una línea que empezó a desarrollar en Melinda y Melinda, aunque aquí engarzado con otro tema muy caro en la obra de Allen, el artista y su obra (o la obra que modela al artista), la cámara del director mueve el objetivo del mundo interior al exterior. Y como ojo escrutador, observa y no juzga, muestra y deja en el espectador la tarea de comprender los motivos.

Como las obras maestras, sales del cine y, durante días, le darás vueltas a las preguntas que te planteas: ¿traicionarías tus principios por sobrevivir? ¿Y por mantener un nivel de vida? Y por amor, ¿qué serías capaz de hacer? Y ya que estamos, ¿qué es el amor: la familia o la pasión?

Tremenda. Me he quitado el mal sabor de boca del Harry Potter del otro día. Aparte de las interpretaciones soberbias de Jonathan Rhys-Meyers y Scarlett Johannson, que ilumina la pantalla con una belleza de proporciones... Caramba, ¿qué hago siendo políticamente correcto en mi bitácora? Johannson está para mojar pan y no parar :) (y reconozco que Rhys-Meyers, también)

domingo, noviembre 27, 2005

Harry Potter y el cáliz de la decepción

Vaya por delante que aún no he leído ninguno de los libros de la saga de J.K. Rowling; y nótese el uso del adverbio aún en la frase anterior, pues algunos amigos, nada sospechosos de consumir lecturas sin calidad, me hablan maravillas de las aventuras en papel del aprendiz de mago. Quizá cuando mi pila me dé un respiro, decida ojearla. Quizá no por los primeros libros, más orientados al público infantil, y que quizá, solo quizá, pequen de falta de experiencia. Pero me dejo llevar por un prejuicio infantil. (El chiste es mío.)

Dejadme también aclarar un segundo punto: jamás juzgo, cuando veo una adaptación, su fidelidad al libro que adapta. Todos habremos oído hablar de las críticas que le llovieron a Peter Jackson por dejar fuera de su El Señor de los Anillos algunos pasajes de la obra más famosa de Tolkien... para alivio de los espectadores. Esa crítica es más bien cosa de los nacionalistas de La Comarca... Retomando el hilo: una adaptación no deja de ser la visión de un artista, cineasta, sobre una obra de otro artista, escritor (normalmente). Así que ha de plasmar su visión, dejar su huella; una adaptación fiel párrafo por párrafo, además de hacer inviable un proyecto cinematográfico, no quedaría muy lejos de lo que se entiende por copia. Vale, lo que digo es de perogrullo, ¿verdad? Pues hay gente que no lo siente así.

¿Cuál es mi experiencia, pues, con el mundo de la Academia Hogwarts? Pues solo la primera película de la serie, Harry Potter y la Piedra Filosofal. Apenas entretenidilla, pero con una dirección muy floja. Que no está mal para ver una sobremesa en vez de esas películas tan de Antena3 sobre crímenes pasionales basados en hechos reales que abofetean el sentido de la incredulidad más laxo. Pero me aburrí. Mucho. Siempre lo cuento: en mitad del partido de quidditch, que se supone que tenía que ser uno de los momentos álgidos, simplemente bostecé y miré el reloj. La segunda película de la serie, obra del mismo director, Chris Columbus (el artífice de películas no aptas para diabéticos como La señorita Doubtfire o Nueve meses, y guionista de algún acierto casual como Gremlins), según el tráiler, parecía incidir en los mismos aspectos de aventura para niños, así que pasé de ir al cine. La tercera entrega, Harry Potter y el prisionero de Azkabán ya atrajo más mi atención, pues parecía virar hacia los aspectos más oscuros de la magia. Pero, por otras cuestiones que no vienen al caso, no pude ir a verla.

Volvamos a la película que fui a ver anoche: Harry Potter y el Cáliz de Fuego. Si la primera parte me aburrió, la segunda ni me interesó, y la tercera no pude verla, ¿qué me motivaba a ver esta cuarta entrega? Muy fácil: el grupo Weird Sisters, que toca en la escena del baile en Hogwart's, y que interpreta los temas, compuestos para la película: "Do the Hippogriff", "This is the Night" y "Magic Works", compuestos por Jarvis Cocker. La banda está compuesta por el mismo Jarvis Cocker, su compañero en el bajo en Pulp, Steve Mackey, sus acompañantes en el proyecto Relaxed Muscle, Jason Buckle en la guitarra rítmica y Steve Claydon en los teclados, y los componentes de Radiohead Jonny Greenwood, guitarra solista, y Phil Selway, batería. Estas tres canciones las podéis escuchar online aquí. Sí, cada uno tiene sus manías, y no me iba a perder al cantante de Pulp en su faceta de actor (algún día iniciaré una serie de entradas sobre el grupo de Sheffield y la relación de Cocker con el cine).

Así que mis expectativas no eran muy elevadas, y después del giro al negro del prisionero de Azkabán, iba dispuesto a dejarme sorprender. Vaya si me sorprendí. Al minuto 15 de metraje ya estaba deseando irme a casa. Por lo menos, en la Piedra Filosofal aguanté una hora sin aburrirme. El único momento que disfruté fue el del baile, y porque me desentendí completamente del diálogo y me concentré en la música.

¿Qué ocurrió? Que ya desde el principio no existe tensión narrativa: se van desarrollando escena tras escena sin que el nexo de unión, también conocido como trama, tenga consistencia. La sensación como espectador fue la de asistir a una serie de sketches aparentemente inconexos, pues los personajes se adecúan al argumento sin que parezca que existan motivaciones o conflictos coherentes que los conduzcan a traves de las crisis que han de superar. En particular, el cabreo de Ron con Harry por la inclusión de su nombre en el Cáliz de Fuego que lo lleva a participar en el torneo (tranquilos, no es ningún spoiler gordo: de hecho, ninguna de las sorpresas hacen honor a su nombre) merecería el calificativo de chiquillada. Y eso es lo que parece la película de principio a fin: una secuencia de imágenes maravillosas para alarde del departamento de efectos especiales y regocijo de los niños, pero poca, muy poca chicha, para quien quiera disfrutar de una película con su presentación, nudo y desenlace. Sin tensión. Sin intriga. Sin trama. Decepcionante. Más, viniendo de un director en teoría competente como Mike Newell.

Al salir de la sala, mis amigas me comentaron que se habían dejado buena parte del argumento del libro fuera del metraje. Eso podría explicar la falta de consistencia en la narración; pero, como comentaba más arriba, el guionista y el director han de ser capaces de realizarnos una adaptación: se verán forzados a dejar cosas fueras, pero han de saber tomar las decisiones artísticas necesarias para trasladar aquello que les interese, aunque sea cambiando la historia, pero sin que por ello la narración adolezca de fisuras, pues al fin y al cabo la intención es contar una historia. No es un programa de Cruz y Raya. Mike Nicholls y su equipo, pues, han demostrado con este título cierta incompetencia narrativa.

La duda que me quedó ayer: ¿merece la pena que vea en DVD El prisionero de Azkabán?

Tras la segunda escucha, os recomiendo especialmente "Magic Works". Preciosa.

domingo, noviembre 20, 2005

"Perfect Day", una canción perfecta

Es curioso comprobar cómo en la música pop las tendencias se hacen obsoletas apenas empiezan a popularizarse. Hoy Coldplay presentarán su decepcionante X&Y en el Palau Sant Jordi, y Keane, aunque sin tanta repercusión (todavía), y desde una vertiente más melosa (si cabe), consiguen con su primer largo un trabajo más sincero y compacto, allí donde Chris Martin parece dar un paso en falso intentando superar A Rush of Blood to the Head pero sin abandonar el "sonido Coldplay" que dicho trabajo establece.

Coldplay y Keane, por mucho que insistan en radios generalistas, no es que presenten un sonido rompedor: desde The Smiths hasta Frank Sinatra, toques épicos a lo U2 o Radiohead, su música no deja de ser una amalgama de estas influencias, que un oído bien entrenado captará sin esforzarse. Así como la sensación del momento, Franz Ferdinand, deben mucho (por no decir que copian) el electricismo de The Jam, de donde también beben otros adalides del nuevo rock "sucio", como The Strokes o The Libertines. O como los emergentes Kaiser Chiefs, que fagocitan influencias del punk de Sex Pistols, pero limando su aspecto más combativo.

Si nos deslizamos al terreno del indie (aunque ya no tan indie desde que es devorado por masas de posmodernos) aún podremos encontrarnos con alguna sorpresa en el campo de la electrónica. Fuera de ahí, nos encontramos con bandas que retoman, reciclan o reviven sonidos de décadas anteriores. Y teniendo a Pulp de "vacaciones permanentes" (una banda que hizo del revival un auténtico paso de gigante hacia delante), y a la espera de lo que pueda salir de las mentes delirantes de Thom Yorke y sus cada vez más experimentales Radiohead, cabe echar un vistazo al pasado...

A pesar de tenerle un gran respecto, reconozco que nunca he prestado la atención que merecía a Lou Reed. Hace años que un buen amigo me grabó el álbum Transformer (hará unos ¡18 años! ¿Os acordáis de cuando nos grabábamos LPs de vinilo en cintas de 60? ¿Y las cintas de metal?). En aquella época, sin embargo, me dejé deslumbrar por The Joshua Tree (deslumbrante, ciertamente) y Rattle and Hum (eh..., ciertamente, uno de los patinazos de los irlandeses) y ahí se quedó, para escuchas esporádicas de un tardoadolescente que prefería el hervor en la sangre del rock épico que no las letras descarnadas del novayorqués... que tampoco entendía demasiado bien.

Sin embargo, en el Festival de Blues de Cerdanyola compré el CD, que había vuelto a ocupar un lugar en la memoria gracias a un reportaje sobre el mismo emitido por el Canal 33. Copié algunas canciones para un CD en mp3 (vale, también me ayudé con la mula), y una canción en concreto se filtró y quedó grabada en mi disco duro/cerebro. Es la grandeza de las melodías sencillas, desnudas de una instrumentación que ahoga la transmisión. Reed jamás ha tenido una gran voz (quienes no le gustan, se quejan de su voz monótona, amelódica); pero es uno de los intérpretes que mejor la saben usar para contar una historia. Transformer es un gran fresco sobre los outsiders que escapan, o huyen, de una sociedad monolítica, incapaz de atender todas las necesidades. Y sobre outsiders pocos saben más que Reed, durante muchos años compartiendo vivencias con la troupe de adláteres de Andy Wharhol.

Para quienes quieren contar grandes historias, Lou Reed, así como Jarvis Cocker en Pulp, son excelentes ejemplos a seguir: los grandes acontecimientos se reflejan en historias cotidianas, en breves pinceladas de cotidianidad. Requiere una gran capacidad de análisis para saber separar qué quieres contar, dónde encontrarlo, y qué personaje modelar para mostrarlo en toda su intensidad. Requiere la mirada de un observador atento, alguien capaz de deslizarse en el personaje para dotarlo de consistencia, desprenderse de prejuicios y mostrar una exquisita sensibilidad para no contaminarlo con tus propios esquemas.

"Pefect day" podría ser la historia de cualquiera, una persona humilde, baqueteada por la vida, sin aspiraciones. Un don nadie. ¿Cómo puede brillar el amor en alguien tan aparentemente muerto en vida?

Si podéis, poned en vuestro iPod/reproductor mp3/radio/disco duro/aunque-sea-id-a-cantarlo-a-un-karaoke "Perfect Day". Acompañad la escucha con la letra (pulsando el título del post o aquí). Escucharéis a Lou Reed que cuenta una historia común, cercana, patética, ayudado por una sencilla melodía en tono menor. Una pequeña historia que encierra uno de los grandes temas del hombre: la huída de la soledad, el miedo a la miseria del alma en un espacio tan inhumano como es la ciudad.

Intento ofreceros una traducción lo más fiel posible:

Un día perfecto
bebemos sangría en el parque
y después, cuando anochece
vamos a casa.

Un día perfecto
damos de comer a los animales en el zoo
después vamos al cine
y volvemos a casa.

Oh, es un día tan perfecto
Estoy contento por haberlo pasado contigo
Oh, es un día tan perfecto
haces que me sienta a gusto me mantienes colgado.

Un día perfecto
nos olvidamos de los problemas
Domingueros de nosotros mismos
es tan divertido.

Un día perfecto
Haces que me olvide de mí mismo
Creí que era alguien diferente
Alguien bueno.

Oh, es un día tan perfecto
Estoy contento por haberlo pasado contigo
Oh, es un día tan perfecto
haces que me sienta a gusto me mantienes colgado.

Cosecharás lo que has sembrado (x4)

Editando: ¡Gracias, Jorge! Corregido.

sábado, noviembre 19, 2005

Buenos días, buenas tardes, buenas noches...

Hola, por favor, gracias... Palabras de uso cada vez menos cotidiano, al menos en la ciudad.

Ya me perdonaréis, pero me revienta sobremanera que en las típicas "situaciones de ascensor" (al entrar a un ascensor, mismamente, o a un vestíbulo, una sala de espera pequeña, cuando te cruzas con alguien en el pasillo), un saludo cortés reciba como respuesta la callada, peor aún cuando viene acompañada con una mirada de incredulidad (o de pasotismo).

Cuanto más poblada la ciudad, más maleducada, desconsiderada parece la gente. Raro es el día en que alguien, en Barcelona, hace caso omiso del saludo. En Sentmenat es mucho más difícil.

Estos días he estado bastante alejado de la bitácora. He pasado unas cuantas semanas ensimismado con "A Feast for Crows". En breve, en vuestros monitores. :)

martes, noviembre 15, 2005

Las hojas en otoño

Paseando bajo la cúpula plomiza, los hombros alzados contra la ventisca, a qué otro lugar podría mirar más que al suelo? Empieza a estar salpicado de hojas que aún conservan el verde seco, estival. Algunos árboles empiezan a estar desnudos; la mayoría aún conservan buena parte, y la única diferencia es el color verde parduzco, las copas menos frondosas...

... Pero algo no va bien...

... ¿A alguien le suena que, a mediados del mes de noviembre, aún no se hayan caído las hojas?

¿Será realmente el síntoma de un cambio?

sábado, noviembre 05, 2005

Concurso

Hacía ya tiempo que no encontraba tiempo para ésta nuestra bitácora.

Bitácora a la que le estoy buscando un nuevo nombre. Pero como mis meninges están secas, pues me gustaría que algún amable lector me ayudase.

"El eterno aprendiz de Sentmenat": bueno, como bien decía mi padre, "aprendiz de todo, maestro de nada". Y así fue que, picando un poco en todas las áreas, sé un poco de todo pero mucho de nada. Eso lo podéis comprobar leyendo entradas anteriores.

Sentmenat... Un lugar muy agradable que durante cuatro años ha sido nuestro hogar. Pequeño (para los estándares de la provincia de Barcelona), acogedor, relajado.

Dentro de poco dejaremos Sentmenat para volver a nuestra ciudad natal, Cerdanyola del Vallès. Donde tenemos a nuestras familias, a parte de nuestros amigos, un pasado que llama a la nostalgia (el peso de estos veintitrece años se hace notar). Aquí también dejamos buenos recuerdos, pero los lazos no son tan fuertes.

Eso sí, una vez estemos en Cerdanyola, podré despacharme a gusto de algún vecino...

¡Espero vuestras ideas!

P.D.: No, no voy a pagar ningún premio, que el precio de los pisos no da más que para Sugus :p

jueves, octubre 27, 2005

Alas negras, palabras negras

Recapitulemos: quizá uno de los mayores problemas de este país, si no el que más, es el aumento desbocado del precio de la vivienda. Factores: múltiples. En resumen, una sola palabra: especulación.

Largo y tendido se ha hablado del endeudamiento de las familias, los pelotazos urbanísticos, el blanqueo de dinero, el crecimiento descontrolado, la falta de suelo edificable, etcétera. Pero en este mundo tan interconectado, a veces las consecuencias son insospechadas.

El pasado lunes, una avioneta se estrelló contra una grúa sin señalizar y sin los permisos correspondientes, que al parecer pinchaba en la servidumbre aeroespacial del Aeropuerto de Sabadell (es decir, en la zona aérea reservada al vuelo, tanto al acceso como al despegue de las instalaciones).

El aeródromo está situado en el extremo noroccidental de Sabadell, entre esta ciudad, Sant Quirze, Badia y Cerdanyola. Los vecinos de la zona exigen el cierre o el traslado del aeropuerto, dada su proximidad a los núcleos de población. No debe haber ni doscientos metros entre la pista y las viviendas más cercanas y, lógicamente, su seguridad está en entredicho. La de los vecinos y la de los usuarios.

Pero...

El Aeropuerto de Sabadell se inauguró oficialmente en 1934, aunque en 1925 ya se usaban algunas pistas provisionales (ver aquí). Sabadell ha sido, junto con Terrassa, la ciudad más importante del Vallès, uno de los centros textiles más importantes del país. Pero su desarrollo masivo, así como el de las ciudades del Cinturón de Barcelona, conoció su etapa más desbocada entre las décadas de 1950 y 1960. Y actualmente, dada la escasez de terreno y la avidez conque, de un solar, de unos baldíos, de unos prados o incluso de un corredor biológico, se alzan edificios/colmena como champiñones, dadas estas condiciones, la urbe ha rodeado el aeródromo. Hoy en día puedes caminar desde Sabadell a Montcada sin salir de la ciudad. Nuestros padres y abuelos recuerdan, sin embargo, las viñas y los bosques que cubrían el Vallès.

El uso del aeródromo ahora se considera peligroso. Sin embargo, parece que nadie tiene en cuenta que no han sido los responsables del aeródromo los que han acercado tanto los edificios a las pistas, cuando lo lógico es que el perímetro de seguridad sea lo más amplio posible. Se alzan voces que apuntan al lado equivocado, que no nos va a devolver la vida de los cuatro jóvenes que alzaron el vuelo y se toparon con una grúa sin permisos en un pasillo aéreo que debería estar libre, ni va a aliviar el dolor de unas familias que, a esas horas, creían que sus maridos, novios, hijos, iban a quedar a tomar un café, acompañar al piloto y volver a casa a cenar.

Sirva esta entrada como humilde y sincero homenaje a estos cuatro jóvenes, y un recuerdo muy especial para Toni. Descansen en paz.

lunes, octubre 17, 2005

Curiosidad malsana

Esta tarde he estado merodeando por el Festival de Blues de Cerdanyola, en el Parc del Turonet. Una carpa bien pertrechada que ha visto desfilar unas cuantas bandas y una feria del disco de ocasión en la que, buscando buscando, me he agenciado con el Transformer de Lou Reed y un piratilla del concierto de U2 de la Elevation Tour en el Palau Sant Jordi (8 de agosto del 2001: sí, también le cantaron el "Happy Birthday" a The Edge).

Y me ha asaltado la duda de no fumador. Mera curiosidad malsana, nunca mejor dicho (y sin ánimo de emitir juicios de valor, porque no soy quién para eso): ¿por qué la gente acostumbra a fumar porros en los conciertos? ¿Algún fumador que me lo pueda explicar? Como no fumador, al que el olor lo pone amarillo ictericia, me es imposible probarlo (no, muchas gracias, que ya veo a alguno diciendo que no es tan molesto como el tabaco; el olor a maría me ha puesto más de una vez verde bilis, lo siento).

jueves, octubre 13, 2005

Nostalgia y el nivel de la vida

Hace unos años, 20 millones de pesetas por un piso me parecía en el límite de las posibilidades de cualquiera. Hoy, mirando precios para volver a Cerdanyola (ay, al final he caído en los brazos de la nostalgia), el precio medio para un piso decente roza los 60. Y tenemos un Ministerio de la Vivienda. ¿Qué ha hecho este Gobierno para parar el subidón de los precios? ¿Y el anterior? ¿Y el anterior?

Y mira que más me vale no hablar de política: hablar no merece la pena, sólo actuar. Pero, cuando vamos a los aspectos cotidianos, resulta que es difícil evitar el tema.

martes, octubre 11, 2005

El mundo se ha vuelto dickiano


Publicado por primera vez en Argentina por Almigesto en 1995, y tras ser revisado por el autor, se acaba de poner a la venta en España Idios kosmos. Claves para Philip K. Dick, de Pablo Capanna, título con la que el Grupo AJEC inaugura su colección de ensayo Tycho. Una iniciativa loable, que espero que en un futuro, aparte de seleccionar títulos de calidad (e Idios kosmos es uno de los mejores acercamientos a la obra de Dick), mejore tanto en el aspecto (con una edición fanzinerosa en cuanto a su aspecto amateur) como en cuidado (los criterios no están para cambiarlos en cada capítulo, ¡caramba!).

A estas horas no voy a entrar en detalle, pues no tengo ni la capacidad ni los conocimientos. Sólo que, esta tarde, he tropezado con la siguiente nota a pie de página que me ha hecho gracia. Se comentaba uno de los delirios que Dick explicaba, ya en los años previos a su muerte, quién sabe si porque realmente había sufrido una de sus alucinaciones o si estaba alimentando su fama de loco, o simplemente riéndose de su interlocutor. En ese "delirio", aseguraba que en 1945, Dios había cambiado el curso de la historia, evitando que Alemania ganase la Segunda Guerra Mundial, tal como pasa en El hombre en el castillo (libro que intentaré reseñar si puedo más adelante). Según Dick, la línea temporal "real" tenía un Nixon que acababa de ser depuesto en agosto de 1974. El pie de página dice:

Hablando con Gwen Lee y Doris Saunter, Dick recordaba que en una de sus novelas de los años sesenta había previsto la llegada de Nixon, entonces gobernador de California, a la presidencia de los Estados Unidos. Murió sin conocer a la dinastía Bush y sin llegar a ver la llegada a la gobernación (y quizá a la presidencia) de Arnold Schwarzenegger. El conocido fisiculturista y actor protagonizó Desafío total, basado precisamente en uno de los textos de Dick. Otra prueba más, si faltaba alguna, de que el mundo se está volviendo dickiano.


Dickiano, si alguien no conoce el término, en una primera y basta aproximación, se refiere a una situación en que la realidad es invadida por elementos ajenos a ella, haciéndola cuestionable, o al menos equiparándola con aquella situación que parece irreal.

Como, por ejemplo, la reforma del Estatut. La defensa a ultranza de la Constitución por unos políticos que en su momento apoyaron el No. España jugándose llegar a la repesca contra San Marino. Un, dos, tres, responda otra vez.

miércoles, octubre 05, 2005

Entradas Simple Minds ya a la venta

Jim Kerr, vocales; Eddie Duffy, bajo (nueva incorporación); Charlie Burchill, guitarra; y Mel Gaynor, 'the best drummer in the world'.
Y yo ya tengo las mías :)

32,80 euros (29,00 + 3,80 por "Precio distribución" -risas enlatadas- a través de Tick Tack Ticket).

Habrá artista invitado (había leído que Goldfrapp los teloneaba en el Reino Unido. Ojalá también se baje por la Ciutat Comtal; sus discos son impactantes).

¡Nos vemos el 13 de marzo en el Razzmatazz 1!

lunes, octubre 03, 2005

Café, eclipse y entradas Simple Minds

Una pequeña pausa para hacer un café, mientras una luz triste cae sobre l'Eixample. Aprovecho para subir la noticia: las entradas para el concierto de los Simple Minds el 13 de marzo en la sala 1 de >Razzmatazz >se ponen a la venta este viernes, 5 de octubre, a partir de las 10:00 h. Disponibles en la red de chupasangres del BBVA que es Tick Tack Ticket (y no, me niego a linkarlos). Y sigo sin saber el precio.

Esta mañana he venido caminando desde la Plaça Tetuan hasta Ausiàs Marc con la versión del In the City of Light de "Book of Brilliant Things". Cuando la música empieza a romper como una tormenta en el acántilado, un agradable cosquilleo me ha erizado el vello de la nuca y los brazos. Un botón de muestra:

I thank you for the shadows
It takes two or three to make company
I thank you for the lightning that shoots up and sparkles in the rain
Some say this could be the great divide
Some day some of them say that our hearts will beat
Like the wheels of the fast train, all around the world

I open up to take a look into the bright and shiny book
Into the open scheme of things
Book of brilliant things
Book of brilliant things

Some say we can be together for a very long time
Some say our hearts will beat like the wheels of a fast train
All around the world
All around the world
All around the world


Words & Music : James Kerr, Charlie Burchill, Mel Gaynor, Derek Forbes, Michael MacNeil (C) EMI Publishing Ltd Reproduced without permission

domingo, octubre 02, 2005

Dos lecturas si tienes una hora

Porque ese es el tiempo medio que tardarás en leerte cualquiera de estos dos libros.

Flores para Algernon, en su versión original (un cuento largo que Daniel Keyes alargaría un año después hasta alcanzar la extensión de novela, con la que ganó merecidamente el premio Hugo en 1960), nos muestra el diario de Charlie, un chico con discapacidad mental; diario en el que, con un esfuerzo entrañable, detalla su día a día. La narración empieza cuando, igual que el ratón Algernon, Charlie es escogido para probar una técnica quirúrgica que, posiblemente, le haga evolucionar hasta niveles de superdotado para... Una lectura sin duda deliciosa, para niños desde 5 años hasta ciento y muchos. Y la adaptación (traduciendo hasta los errores ortográficos) es digna de elogio.

Provocación se situa en las antípodas de Flores para Algernon. Stanislaw Lem retoma el género del ensayo sobre libros imaginarios, y reseña Der Völkermord, de Horst Aspernicus (trad.: El genocidio; ya os podéis imaginar de qué trata); y Un minuto humano, de J. Johnson y S. Johnson, un completo libro de tablas y estadísticas que detalla
todo
lo que le pasa a la Humanidad en un minuto.
Como dice David Torres en el prólogo:

Con Lem, siempre tengo la sensación de que se me escapa algo. No en vano, en Alemania, es considerado un filósofo, y en Rusia, un científico. Como nadie, ni siquiera él, es profeta en su tierra, en Polonia lo conocen ante todo como escritor de libros para niños.* En realidad, desde 1961, año en que publicó Solaris (una de las obras maestras de la ciencia ficción, y una de las novelas del siglo [XX]), su nombre fue colocado al lado de Calvino, Borges y Cortázar, en ese reducido grupo de escritores que forman el corazón mismo de la literatura fantástica, una selecta vanguardia a la que más tarde se incorporarían autores tan dispares como Burgess, Barth o Torrente Ballester.


*Digo yo, como a los infantes polacos les den como lectura Ciberíada, parábola robótica sobre la estupidez humana, quien lo logre entender será, sin lugar a dudas, un superdotado. Yo aún le tengo que dar unas cuantas lecturas para extraer un 50% de lo que Lem me quiere decir.

Suscribo las palabras de Torres. Aun así, la impresión de su primera lectura es quizá el análisis más descarnado sobre la barbarie humana, pues indaga en lo más íntimo y nuclear de la podedumbre que, excepto santones y sencillos, en mayor o menor medida todos albergamos. El Holocausto analizado en su fundamento filosófico. Demoledor. En el otro extremo de esta provocación, la sátira sobre la pequeñez del hombre respecto al Universo, pequeñez que el hombre, a través de la ciencia, intenta una y otra vez superar. El único libro que, durante unos días, y mientras no llegó alguna votación de última hora, tenía una media de 5,00 en el hit parade de Gigamesh. Y no es para menos.

Daniel Keyes
Flores para Algernon
Título original: Flowers for Algernon
Traducción de Paz Barroso
Ilustraciones de Etienne Delessert
Ed. SM, colección El Barco de Vapor, núm. 164
ISBN: 84-675-0348-3
P.V.P.: 6,20 euros

Stanislaw Lem
Provocación
Título original: Prowokacja
Traducción de Joanna Bardzinska y Kasia Dubla
Ed. Funambulista, colección LiteraDura, núm. 164
ISBN: 84-934079-6-8
P.V.P.: 13,95 euros

Nuevas convenciones sociales: OT

Antes, años atrás, la tertulia a la hora del café, según contaba mi padre, giraba en torno al fútbol, el precio de la cesta de la compra o, algunas veces, sobre las actuaciones en Gente Joven. ¿Alguien se acuerda?

Bien, hoy en día tenemos Operación Triunfo para tomar el relevo de Gente Joven... y del fútbol y de todo lo demás, exceptuando a Gran Hermano (el de la tele, no el de George Orwell, libro in-dispensable -como diría el gran lumbreras del Jesulín de Lubrique-). ¿Por la calidad musical? No, desde luego, por mucho que a usted le guste: entrar en la academia y ser el más guapo, el más simpático, el más llorón (personaje en el que se basa el Lobhombre de Calico Electrónico, seguro) les asegura un contrato y la permanencia de las listas, superando a cualquier lanzamiento de Subterfuge, Sanctuary y demás independientes. ¿Alguno de ellos sabe tocar medianamente un instrumento? ¿Poner la pasión en la voz que pondría Martirio? ¿Crear unas letras mínimamente inteligentes, que no repita Bulería veinte veces?

Un poco más de cultura musical, por Dick bendito...

viernes, septiembre 23, 2005

Experiencias de márketing directo en literatura

Para Álex, a ver si adivina qué personaje de esta novela podría ser.
Rudy. 10-VII-2005


Así reza la dedicatoria que Rodolfo Martínez, Rudy, escribió en el ejemplar de Sherlock Holmes y las huellas del poeta que acababa de comprar en la parada de Negra y Criminal en la Semana Negra de Gijón.

No sería capaz de decir ahora la cantidad de libros pendientes de lectura. Fácilmente pasan la centena. Este comentario me estuvo rondando mientras veía el libro reposando tumbado sobre otros, bien dispuestos en el estante.

Así que pasó por delante de muchos otros libros que también me pedían mi atención.

Y fui leyendo, curioso, pero sin condicionar la lectura por la duda. Y, al llegar a la segunda parte del libro, ¡zas! (y nunca mejor dicho) aparece un personaje con el me dio la sensación de compartir algunas peculiaridades de mi carácter. No voy a entrar en detalles, porque no sé si me halaga o me da apuro. Para los que se lo hayan leído, supongo que el último comentario les habrá dado una pista. Para los que no, les diré... que se compren el libro y se lo lean.

lunes, septiembre 19, 2005

León el Africano

A mí, Hasan, hijo de Mohamed el alamín, a mí, Juan León de Medicis, circuncidado por la mano de un barbero y bautizado por la mano de un papa, me llaman hoy el Africano, pero ni de África, ni de Europa, ni de Arabia soy. Me llaman también el Granadino, el Fesí, el Zayyati, pero no procedo de ningún país, de ninguna ciudad, de ninguna tribu. Soy hijo del camino, caravana es mi patria y mi vida la más inesperada travesía.

León el Africano, Amin Maalouf


Uno de los inicios más preciosos que he leído. Disfrutadlo.

Nuevas convenciones sociales: el catálogo Ikea

El Corte Inglés ya no marca las estaciones en este país: ahora, es la publicación anual del catálogo Ikea para la el año (que, para la empresa sueca, empieza en septiembre) la que, cual solsticio de invierno, marca el inicio de la temporada. Ni los libros del cole, ni la nueva temporada de la Liga de las Estrellas, nada le puede hacer sombra al sol de medianoche.

Y es que, desde que Ikea se estableció con sus dos primeros almacenes en este país, cada temporada, en nuestros buzones, aparecía un catálogo de más de 200 páginas, en las que una serie de diseñadores que nos dicen suecos, que nos dicen jóvenes, que nos dicen imaginativos, reciclan las ideas más camp de los 50 y los 60 envueltas en una pátina de pseudomodernidad. Ahora, afianzada en nuestro país y sin necesidad de semejante esfuerzo publicitario, éste no aparece en todos los buzones; es más, pasan a venderse en los kioscos. Y este hecho, el que ya no aparezca cada septiembre puntualmente junto con la liquidación de agosto de la tarjeta de crédito, alienta el tráfico de catálogos entre familiares, amigos y conocidos. Acabo de presenciar cómo una conversación entre cuatro amigos ha estado a punto de ser abortada porque alguien sacaba de la bolsa el dicho(so) catálogo.

Curioso cómo algunos rituales cambian con las nuevas generaciones. Ni Star Trek, oiga.

Por cierto, si has comprado últimamente en Ikea, ve con cuidado con ciertas regletas.

sábado, septiembre 17, 2005

National Geographic y una espantosa película catastrofista

Ya os he hablado de Bruce Sterling, autor encuadrado básicamente en el movimiento del ciberpunk, pero cuyo rasgo más característico es, diría yo, cierta "rabia" en su estilo.

Ayer, por cierto, colgué el párrafo que "misteriosamente" desapareció en la penúltima página de su cuento "No opinamos lo mismo" publicado en el Gigamesh 41. Si os quedásteis con la ganas, lo podéis descargar aquí.

Sterling lleva un cuaderno de bitácora que actualiza casi a diario. Quizá un pelín tendencioso, pero como cojea de la misma tendencia que yo, pues miel sobre hojuelas :D Pero este artículo está anarroseado directamente del National Geographic. Y cuando un año antes alerta sobre lo que supondría un huracán abatiéndose sobre Nueva Orleáns y "adivina" todo lo que en realidad ocurrió...

... y nos ponemos a buscar culpables...

lunes, septiembre 12, 2005

El día de la marmota, según Pilar Rahola

Mira que pocas veces estoy de acuerdo con ella, y no por las ideas que defiende, sino por su acercamiento, demasiado radical en muchas ocasiones, demagógico en su mayoría, partiendo de supuestos tan arbitrarios como los que critica. Pero, en esta ocasión, en El Periódico de Catalunya (y perdonadme, que ya sé que el link abierto sólo dura un día, así que aprovechad) en este artículo le mete cera a mi querido Tripartito. Porque se la merece, básicamente. Porque su inoperancia llega a cansar y, al final, acabaremos yendo a no votar y franqueando de nuevo la entrada a la Generalitat a CiU. Y no es plan.

viernes, septiembre 09, 2005

En caso que creyeses que este problema no te iba a afectar...

Bruce Sterling es uno de los autores de ciencia ficción (o ficción especulativa, o como se le quiera llamar) más inquietos de las últimas dos décadas. Quizá «combativo» sea una adjetivo más adecuado, o complementario al anterior. Como algunos otros, además de sus actividad narrativa, vuelca sus inquietudes y su rabia en su cuaderno de bitácora.

En su última entrada, del jueves 8 de septiembre, cita el siguiente artículo sobre aspectos del cambio climático en los que no mucha gente se ha parado a pensar. Sí, porque habrá gente que el ecologismo se la traiga al pairo, a los que hay que recordar que vivimos en ese mismo mundo que se está yendo a la mierda (¿quién duda que el tiempo ha cambiado de diez años aquí?). Cuando veas una riada que se lleva tu coche porque se han urbanizado los torrentes; un tornado, nada habitual porque el agua del mar estaba más fría, golpee tus cristales; o cuando el precio de la fruta y la verdura suba a niveles inauditos (¿a alguien le suena el kilo de judias verdes a 6 euros; alguien se lo imaginaba hace diez años?), bueno, que recuerde este artículo.

jueves, septiembre 08, 2005

Todos a la Marcha Blanca

Podría hablar sobre la cada vez más amenazada privacidad en nuestra vida, sobre todo navegando usando las herramientas de la todopoderosa Microsoft (en esta noticia, a la que se vinculaba desde el boletín del Centro de Alertas Antivirus del Estado Español de ayer, se lee que el próximo Internet Explorer 7 enviará la información de los sitios por los que se navega en Internet, poniendo como excusa la seguridad -no sé dónde habré oído eso antes. ¿En boca de Bush, de Aznar, de muchos otros políticos?- de los usuarios).

O también podría hablar, en clave más relajada, sobre los resultados de una investigación realmente peculiar ("¿Qué me has dicho, cariño?"). Y es que hay gente que no tiene otra cosa en la que perder el tiempo...

Sin embargo, prefiero animaros a que acudáis a las concentraciones de este fin de semana en la lucha ciudadana por erradicar la pobreza en el mundo. Uníos a la convocatorias más cercana a la ciudad: tenéis la información aquí y aquí, por lo menos.

Lo que da rabia es que, al contrario que otras manifestaciones, a ésta no se le ha dado mucha publicidad en medios. Está visto que estos eventos, o son mediáticos o se decide que no interesan.

martes, septiembre 06, 2005

Machiroku, el mejor sushi de Barcelona

Hoy ha sido un día feliz: el restaurante japonés Machiroku ha abierto sus puertas después de un mes de vacaciones. Sashi (discúlpame si no se escribe así tu nombre), su chico y el personal se tenían bien merecido el descanso.

¡Cuántos proyectos han nacido allí, cuántos sumarios de Gigamesh se han perfilado, cuántos libros se han decidido! También he disfrutado de cenitas románticas con Nuria, otras con amigos los jueves por la noche, alguna otra como preámbulo de una noche de fiesta. Casi que me ven más aquí que en casa de mi madre :)

Hay quien dice (¿verdad, Antonio?) que le deben echar alguna sustancia adictiva a la comida. Lo cierto es que en ningún otro restaurante al que haya ido (y seguramente me he dejado muchos) el pescado se fundía así en la boca ni liberaba todo su intenso sabor en el paladar, cálido y envolvente, suave como un beso.

La amabilidad de Sashi es, además, extraordinaria. Traspasar el umbral del pequeño local es como entrar en casa del anfitrión ideal, que se desvive para que el invitado se sienta a gusto.

Aunque hoy acaba de subir los precios (llevaban seis años sin subirlos, cosa que hay que destacar), os puedo asegurar que es el mejor en relación calidad/precio... Bueno, y desde mi punto de vist... paladar, el mejor en calidad, pero sin parangón. Al mediodía sirve menús (hay tres básicos: sushi, teriyaki y yakiniku, y según el día, de dos a cinco menús más, dependiendo de lo que haya en la despensa), cuyo precio oscila entre 10 y 15 euros. Una ganga. Y no te quedas con hambre. Por la noche hay una carta muy bien surtida, de platos sencillos pero exquisitos, y el precio por persona puede variar entre 15 hasta 40 si tienes mucha, pero mucha hambre.

Si alguna vez vienes a Barcelona y te gusta la comida japonesa, pásate por aquí: saldrás relamiéndote los labios.

domingo, septiembre 04, 2005

Pasen y vean, o cómo Katrina ha levantado un velo que Bush & Co. mantenían con celo

Cuál Freak Show presentado por un Bunbury que parece poco dispuesto a volver al escenario, Nueva Orléans nos ha traído ímágenes estremecedoras. Tantos muertos como al otro lado del charco y un poco más allá, cruzando el Golfo, en la cuna de la Humanidad. Hoy ha sido Katrina, una fuerza de la Naturaleza (¿seguro, de la Naturaleza? ¿No habrá otra mano detrás de ella?) la que ha golpeado otro Golfo, el de México.

Pero seguro que más de uno se habrá preguntado: "Qué curioso. Las únicas víctimas que veo son negras". Sí, y además, pobres. Podría intentar hacer un análisis, pero caería en los típicos lugares comunes en que un ciudadano, informado, vale, pero no experto, acostumbra a caer. Nada mejor, pues, que leer una columna de todo un experto, Manuel Castells, y después tratar de encerrar la ira en una caja... o intentar hacer algo para cambiar esta mierda de mundo.

jueves, septiembre 01, 2005

Puerta al verano, de Robert Heinlein

Heinlein es un autor rodeado de un aura polémica respecto a su ideología, que en su obra parece vislumbrarse aunque no de forma completamente clara. O, por lo menos, no muy clara para sus lectores, que se dividen entre los que lo consideran un ultraliberal furibundo o un anarquista radical.

Sea como fuere, si Robert A. Heinlein aún es leído es, indudablemente, por su calidad a la hora de escribir. Este Puerta al verano es un ejemplo entretenido de qué te puedes encontrar en un libro de Heinlein. El sentido del ritmo es ciertamente notable en esta obra, menor en comparación con sus grandes clásicos del estilo La luna es una cruel amante o Tropas del espacio. El protagonista es el arquetipo heinleiniano del hombre que, con su voluntad, vence (casi) todas las adversidades y es capaz de hacerse un hueco en la sociedad: honesto aunque agresivo, desconfiado del resto del mundo y un punto misógino (las dos protagonistas varían entre la que en catalán llamaríamos una mala pècora que es la que genera el conflicto, y la chica que espera pacientemente a su hombre figura protectora... aunque tengan que pasar varias décadas. Una fidelidad a prueba de bombas).

Dan Davis es sin duda un personaje que se nos quedará grabado por el desparpajo con que expone su ideología (aquí yo voto por la ideología ultralibreal), un personaje consistente, bravucón, pero a la vez fiel y obstinado, cuya evolución gratifica al lector al identificarse con alguien de convicción fuerte, aunque para conseguir el objetivo justo acabe cometiendo algunos "delitos" según la sociedad, no según su escala de valores.

Por otra parte, hay que destacar, además del ritmo, las excelentes descripciones de Heinlein, útiles y precisas durante la acción, y poéticas durante los momentos de remanso (impagable esa puerta al verano que reclama el gato de Davis cada invierno).

Yo me decidí a comprar Puerta al verano tras oír una deliciosa descripción del mismo de boca de Fernando Ángel Moreno y comprobar que era uno de los primeros títulos que La Factoría publicaba en bolsillo bajo la joint-venture de Puzzle. Porque, de verdad, pagar 18 o 20 euros por un libro con una traducción bastante poco natural (por ser finos) y una edición que incorpora como extra el juego "adivina dónde acaba el diálogo y dónde empieza el inciso", o el más divertido aún "adivina qué criterio uso aquí" me hubiese dolido en el bolsillo y en la moral. El poco cuidado puesto en la edición es de juzgado. Y que se mantengan en esta edición puede dañar el prestigio del sello creado para bolsillo por La Factoria y otras editoriales.

Robert A. Heinlein
Puerta al verano
Puzzle/La Factoría de Ideas, col. Ciencia Ficción
ISBN: 84-96525-34-1
P.V.P.: 7,95 euros

lunes, agosto 29, 2005

Detrás de todo gran hombre...

... y con toda la razón del mundo. He buscado más información sobre Ali Stewart y, aparte del link del título, he encontrado este artículo (bastante majo) sobre la fundadora de la marca de ropa de comercio justo Edun. Echadle un vistazo, que merece mucho la pena.

Consignas, complejo de Peter Pan y cambiar el mundo

Hoy ha caído en mis manos el dominical de La Vanguardia (gracias, Ce) del 7 de agosto, en el que el artículo de portada es una entrevista, concedida por Bono a David Dusster en Amsterdam 3 semanas antes de que el Vertigo//2005 Tour aterrizase en Barcelona. El tema central de la entrevista es el activismo de Bono en temas sociales, con especial énfasis en la erradicación de la pobreza extrema, que ya comenté en un post anterior.

En algún caso puede pecar de ingenuidad, y sin embargo... y sin embargo, quizá esa misma ingenuidad es la fuerza que falta para cambiar el mundo. Recuperar esa ilusión que muchos dejamos en el camino y que, al recordarla, sentimos una punzada aquí adentro e, instintivamente, sabemos que ahí había una fuerza positiva, correcta. En palabras de Paul Hewson (a.k.a. Bono):

Cuando eres más joven quieres librarte de la ingenuidad, pero ahora que me he
ido haciendo mayor [Bono tiene 45 años] me he dado cuenta de lo poderosos que
éramos con nuestra ingenuidad. Teníamos algo. Cuanto más mundo conoces, más te
das cuenta de que tenías razón antes. Cuando eres joven crees que puedes cambiar
el mundo y conforme creces, consideras que es imposible. Pero en verdad tenías
razón cuando eras joven.


Esa ingenuidad puede llegar a ser peligrosa. Porque, respecto a la pobreza extrema, conduce a pensar que condonar la deuda es suficiente. No; eso es caridad. ¿Os acordáis de lo que decía Confucio sobre dar un pescado o enseñar a pescar? Ante la pregunta de que la pobreza continúa, Bono lo tiene bastante claro:

Desafortunadamente, la pobreza no es un asunto simple y tiene raíces
estructurales. Ahora ya no basta con la caridad, ahora tenemos que hablar de
justicia y de hacer un mundo muy diferente.


¿Se hace lo suficiente? Ni de lejos. ¿Tiene Bono el poder de cambiar el mundo? No, ni Bono, ni el Papa, ni Bush y su gabinete solos. Pero convencer a los gobernantes y a los poderosos, o al menos sentarlos y que discutan sobre ello, es un primer paso (de un trayecto que viene a ser como el Camino de Santiago dando la vuelta por Ciudad del Cabo). Y han de darse cuenta de que la caridad no es más que una relación de dependencia, y esa dependencia implica una humillación para el pobre. África no es pobre, no en recursos, no en potencial. África es una tierra expoliada. Se tiene que asentar una relación en otro orden:

El comercio... tal vez vendrá de África. Una cosa que aprendí en África [Bono y
su mujer Ali pasaron un mes de incógnito trabajando en un orfanato en Etiopía
después del Live Aid del 1985] es que ellos siempre quieren hablar de comercio y
no de ayuda. Y puedo entender por qué, porque ellos no quieren ser siempre
tratados con condescendencia. Siempre estamos pensando en los pobres africanos.
Y ellos quieren hablar de comercio, de teléfonos, son gente muy emprendedora.


Para alguien que reconoce hervir de rabia por dentro (por eso es un rockero), aprender a ser pragmático ha sido vital para conseguir reunirse con los líderes del G-8. En el editorial del dominical, Josep Carles Rius, sobre Bono y su trabajo, opina:

Las palabras de Bono cobran fuerza ante la impotencia de las viejas recetas
políticas para resolver desafíos de una magnitud y una complejidad inéditas en
los últimos decenios. Y su prestigio se consolida en un mundo carente de
liderazgos incuestionables al frente de las mayores potencias. Bono representa
una música y una voz respetada en todo el mundo, uno de los escasos referentes
morales a escala global en tiempos de desconcierto. Es como la tercera vía entre
una izquierda que ha perdido su capacidad de transformación de la historia y una
derecha desbordada por el vértigo de los cambios. Es, al menos, la esperanza de
que aún es posible cambiar el mundo.


Esa izquierda desnortada que, a los votantes de izquierda, nos avergüenza; esa derecha anclada, inmóvil. Políticos: tomad nota.

Babylon 5 2.ª temporada en junio del 2006

Leo en la web española Estrella Naciente (dedicada al mundo de Babylon 5 y a otros trabajos de su creador, J. Michael Straczynski) la noticia (disponible aquí y pinchando sobre el título del post) de que Warner Bros. España (sección Home Video) ha anunciado la intención de lanzar al mercado español la segunda temporada de esta serie (en mi modesta opinión, la mejor serie de ciencia ficción de todos los tiempos) para junio del 2006. Atentos a la expresión: tienen la intención. O sea, tomad esta fecha con pinzas.

(Absteneos de las bromitas sobre las fechas de Tormenta de espadas, que se os ve venir de lejos...)

Donde dije digo, digo trece

¿Verdad que dije que el 3 de marzo del 2006 Simple Minds actuarían en la sala Razzmatazz? Pues alguien se equivocó. Bueno, yo fui demasiado rápido. Y eso que en la web de Razzmatazz aún no han confirmado nada.

Aun así, la información de la página web oficial de Simple Minds ha cambiado la fecha por la del 13 de marzo del 2006 en la misma sala. Seguiremos informando. (Bueno, informaré de la puesta a la venta en cuanto tenga mis entradas en las manos. Ya sé que no las van a agotar como las de los U2 a través de la vergonzosa Tick Tack Ticket -y sus inexplicables comisiones por gestión de entrada-, pero uno no sólo es friki de la literatura fantástica...).

domingo, agosto 28, 2005

Música con fecha de caducidad

Donde primero siento el paso del tiempo es, curiosamente, escuchando música. Si hace lo que yo no creo que sean tantos años, es decir, allá por 1987, odiaba con toda mi alma la música facilona, el Euro-dance más baboso del que la llamada Hit Factory de Stock, Aitken & Waterman producía para los fans más descerebrados cual porras de una churrería, hoy me sorprendo tarareando, ante mi propia vergüenza, "Never Gonna Give You Up" o "Together Forever" las raras ocasiones en que suenan por la radio.

Hoy suenan tran tremendamente desfasadas... Y me traen tan gratos recuerdos de una época tan feliz, tan despreocupada...

Y, entonces, uno se pregunta, ¿qué ha sido de aquel chaval de 19 años con pinta de no haber roto nunca un plato y que las traía tan de cabeza? Bueno, recordad su imagen entre el '87 y el '89, respirad hondo, no os asustéis (el tiempo no pasa en balde y el fotógrafo no fue excesivamente piadoso con él) y pinchad aquí.

¿Y por qué él, justamente, de todos los productos de la Hit Factory (Bananarama, Kylie Minogue, Jason Donovan, Mel & Kim, Big Fun... ¡cuánto daño hicieron a la música!), es el que recuerdo con mayor agrado? Casi 20 años después, mitigada ya la aversión visceral, hay que reconocer que, de todos los arriba mencionados, es el que, puesto ante un micrófono, era capaz de demostrar que, si no talento, al menos poseía una voz de barítono capaz de dotar de vida cualquier canción.

En 1991 publicó un album cuyo nombre era realmente significativo: Free. Gran parte de sus cortes habían sido escritos por el mismo Astley, y parecía dar un portazo al sonido empalagoso marca SAW para sumergirse en el soul, comercial, pero soul al fin y al cabo. Tras algo así como 8 hit-singles prefabricados por los SAW, Free no alcanzó nunca la clasificación en listas de los dos discos anteriores. Y del siguiente, Body & Soul, hace sólo dos días, buceando por la red, que me enteré de su existencia.

Quizá fue porque, como algún crítico ha dicho, cuando saltó a la arena del soul ya despuntaban animales (de escena) como Michael Bolton o Kenny G que rápidamente lo eclipsaron, toda vez que Rick Astley había sido encasillado como marioneta de Stock, Aitken & Waterman producto exclusivo para discotecas y eso, a su pesar, le lastró mucho. O quizá, como indicaba algún rumor, los mismos SAW se esforzaron para sabotear la carrera de Rick Astley. Él mismo indica en su web que llegó a un punto en que se le desarrolló una fobia a viajar en avión que no era sino una consecuencia del stress al que su rango de popstar lo había sometido. Y, con una novia y una niña de dos años, creyó que lo mejor era retirarse con toda la pasta gansa que había ganado (un porcentaje mínimo de los royalties por las canciones escritas por SAW; así que imaginad lo que debe haber ingresado estetriunvirato del pop) y ser un buen padre de familia.

Personalmente, y por mucho que me disgustase su carrera musical, al menos bajo la tutela de Stock, Aitken y Waterman (lo que escuché del Free era, siendo caritativo, correcto; su voz podía transmitir mucho pero la producción era insulsa, como cualquier cosa del Bolton ese), no puedo menos que alabar la valentía de romper con la factoría SAW e intentar tomar las riendas de su obra artística. En octubre lanzará un nuevo disco, Portrait, en el que versiona clásicos de artistas como Frank Sinatra, Nat King Cole o Matt Monro. Nada original, eso seguro, pero... le deseo suerte. Me cae bien.

sábado, agosto 27, 2005

¿Quién se viene a ver a los Simple Minds en el Razzmatazz?

Hablaba hace poco de uno de mis grupos favoritos, los Simple Minds, que han formado parte de la banda sonora de mi vida desde... ¡1989!

Pues bien, hoy me llevo dos gratas sorpresas. La primera, su página web oficial parece que ya funciona de nuevo (aunque, para estar al día, la más completa es la de Simon Cornwell). La segunda, si accedéis a la página "Tour dates":

Simple Minds actúa en la sala Razzmatazz el 3 de marzo.

Aunque, si miráis justo encima, resulta que el mismo día actúan en la sala Phoenixhalle de Mainz (Alemania). ¿Dos conciertos el mismo día o dedazo del que transcribe la fecha? Ni idea. Por si acaso, en mi equipo suena The Best of Simple Minds, "Waterfront".

En la misma sala, el 5 de noviembre actuará Goldfrapp. ¿Alguien se apunta?

miércoles, agosto 24, 2005

Siempre nos quedará París

No somos ni Ingrid Bergman (aunque Nuria es igual, o más, de guapa) ni Humpfrey Bogart (qué más quisiera yo...), pero hemos pasado unos días de ensueño en la Ciudad de la Luz.

Como un diario de viaje sería tedioso, lo que haré será comentar impresiones, anécdotas, curiosidades; detalles que hagan de este post un recuerdo caótico (es decir, vivo, real en el sentido en que un recuerdo puede ser real) de unas vacaciones cortas pero intensas.

El viaje fue, eso sí, largo, largo y caro: 1.070 km y tres depósitos. Si viajáis a Francia, donde la gasolina está a 0,3 cm/l más caro, la primera recomendación es clara: repostad antes de cruzar la frontera. Y no lo hagáis justo en la última área de servicio, sino antes, si no queréis hacer cola. Apenas gastaréis un litro más para llegar...

Las autopistas francesas están bien, son dignas... y muy caras también. Os recomiendo que planifiquéis cualquier viaje, y para eso la guía Michelin es muy buena.

Nos pasamos todo el miércoles 17 de agosto en la carretera, sin pisar el acelerador (para qué, si lo importante es llegar y enteros): salimos a las 6:40 y llegamos sobre las 20:30h. Encontrar el hotel ya fue un poco más complicado; aparcar, no mucho: en agosto son pocos los parisinos que no abandonan la ciudad. En casi toda la ciudad, excepto en los alrededores del Museo de Orsay, durante agosto el parking es gratuito. Durante el resto del año funciona en toda la ciudad un sistema de parkímetros similar al de la nueva Área Verda de Barcelona.

Eso sí, para moverse por la ciudad, nada mejor que usar la red de transporte público. Yo siempre opto por el Metro (algunas de cuyas estaciones son tan alucinantes como la de la foto).


Así que el coche se quedó aparcado el domingo por la noche en la calle, y hasta el lunes por la mañana no se volvió a tocar para volver a Barcelona, pero entre estos dos días...

... Comimos bastante bien. Según el día, según el lugar. Según el presupuesto. Porque París es una ciudad terriblemente cara. Pongamos por ejemplo una caña (un pression): 4,50 euros en una terracita cerca de Trocadero. ¿Caro por estar cerca de la torre Eiffel? Non. 3,50 un refresco en un kiosco cutrecillo. 5,00 euros en un restaurante griego de menú en St. Michel (también conocido como Barrio Latino). Y la comida es otro cantar: preparad una media de 25 euros por persona para comer el plato del día, entremeses y postre. Y la bebida igual ni entra.

Nada más descargar en el hotel fuimos a buscar un restaurante para cenar. Y tras caérsenos los mismísimos al suelo tras ver los precios de los restaurantes, acabamos en La cuillère en bois, una crèperie al estilo bretón barata y con platos deliciosos. Y, bueno, un ratoncito muy juguetón en el comedor del sótano que ningún cliente delató. Si pasáis por París, yo os lo recomiendo: una galette es más que suficiente. Una galette y una ensalada (servida en una fuente) os hará reventar. 108 rue des Entrepeneurs, 75015 Paris. Métro: Commerce o Felix Faure.

El jueves lo dedicamos por la mañana a patearnos Montmartre y perdernos (bueno, es un decir, con tanta gente era imposible) por sus callejuelas bohemias. Claro que, cuando los bohemios son horda y hay que quitárselos de encima (si no quedo bien ni en foto, ¿a qué voy a querer un carboncillo, y menos una caricatura?). Aun así, queda algo auténtico en el ambiente: quizá sea la luz, quizá la intimidad de unas calles quebradas, quizá los cenadores de metal. Y París que queda bajo tus pies. Obligatorio perderse aquí.

La oferta culinaria aquí es amplia y bastante más barata que en otros puntos igual de turísticos de la ciudad. Nuestra opción esa mañana fue un par de kebabs y la búsqueda de un parquecito tranquilo, uno que queda a la derecha de la basílica del Sacre Coeur, que aparece en la primera foto y en esta de la izquierda, donde el motivo no era precisamente la basílica...).

Por la tarde bajamos por la calle Pigalle (no muy aconsejable, por cierto) hasta llegar a las Galerías Lafayette (El Corte Inglés de París), la Ópera, la Concordia y los Campos Eliseos, que subimos hasta llegar al Arco de Triunfo, donde se celebraba un homenaje a los veteranos de la Segunda Guerra Mundial. De éstos, quedaban cinco; sus familiares estaban en segundo plano y, la verdad, la dignidad con que estos ancianos recordaban la lucha contra el fascismo y el Holocausto se mezclaba con un sentimiento de tristeza, pues en poco tiempo ellos no serán más que un recuerdo, y cada vez más borroso.

La jornada acabó bajo la torre Eiffel iluminada... pero esto ya os lo contaré en otro momento, que esta entrada está quedando muy larga.

martes, agosto 16, 2005

Simple Minds: la canción del eterno retorno

Black & White, su próximo álbum Ya sé que no debería poner links a noticias de El Periódico, pues sólo duran "en abierto" el día de su publicación. Pero hoy no puedo menos que alegrarme que, aunque sea brevemente, comenten la próxima aparición del nuevo álbum de los escoceses Simple Minds, Black & White 050505.

Conocí a los de Glasgow con su Street Fighting Years (Virgin, 1989), ya pasados los éxitos de la que fuese su década prodigiosa, los álbums New Gold Dream (81-82-83-84) (Virgin, 1982), Sparkle in the Rain (Virgin, 1984) y Once Upon A Time (Virgin, 1985) y, sobre todo, el único número uno que alcanzaron en los States, la canción de la banda sonora de la película The Breakfast Club (titulada en España El club de los cinco), escrita por Steve Schiff y Keith Forsey expresamente para los SM y que Jim Kerr fue reticente a grabar (pues, excepto alguna cover version, se negaba a grabar nada que no hubiesen escrito ellos): "Don't You (Forget About Me)".

Street Fightign Years
En el 89 me impresionaron por la fuerza diríase espiritual que emanaban de sus canciones y, sobre todo, el fuerte activismo pro derechos humanos que destila el ya mencionado Street Fighting Years. Kerr daba lo mejor de sí mismo en un disco tenso, en el que Charlie Burchill (guitarra) y Mike MacNeil (teclados) se recrearon en una instrumentación densa pero a su vez cristalina, que se explayaba en medios tiempos y en compases más complejos, dejando la sección rítmica, que tan buenos éxitos les había deparado en los últimos cinco años, para algunos (pocos) cortes contundentes y directos que aún recordaban a los SM que llenaban los estadios.

Siendo, desde mi punto de vista, el disco más redondo de los SM, la crítica los vapuleó a base de bien y el público les negó la acogida de los trabajos anteriores. Al finalizar la gira correspondiente, MacNeil decidió abandonar el grupo, cansado de dar tantas vueltas por el mundo. El siguiente trabajo, Real Life (Virgin, 1991), dejaba a Jim Kerr y Charlie Burchill Jim Kerr y Charlie Burchill, en una foto promocional del directo en París como los únicos supervivientes de la formación original, y en su sonido acusaron la ausencia de Mike, pues el sonido característico, en el que el teclado daba una textura compacta y clara a la melodía, desapareció, dejando paso a un disco que se apoyaba demasiado en cajas de ritmos y en programación. Hecho que, además, ahogó el buen trabajo de Mel Gaynor en las baquetas (the best drummer in the world según lo presenta Jim Kerr en cada concierto desde los tiempos del New Gold Dream).

Desde entonces, los Simple Minds han ido dando un paso adelante y otro hacia atrás: en cada proyecto anunciaban o un nuevo sonido (caso de Néapolis (Chrysalis, 1998), quizá uno de los mejores discos que sacaron en los 90) o un regreso al sonido "clásico" (como fue el Good News From The Next World (Virgin, 1995), donde abusaron de la estridencia guitarrera y quedó como un pobre remedo del Once Upon A Time). Además de ir pasando de una discográfica a otra, después de la fea disputa legal por los derechos del disco "fantasma" Our Secrets Are The Same.

Este nuevo proyecto se presenta como "una vuelta al sonido clásico de los Simple Minds, con nuevas energías". A mi parecer, tanto el Real Life como el Good News From The Next World naufragaron en ese intento de volver la vista atrás, cuando, en la época en que cada nuevo disco era una aventura diferente, lograron un auténtico póker de obras conceptuales, en los que Jim Kerr explotaba tras el sonido de unos Simple Minds que se batían cara a cara con los U2 (dos grupos tan parecidos y, a la vez, musicalmente, tan diferentes).

Les deseo muy buena suerte con este Black & White 050505. Espero con impaciencia tenerlo en mi reproductor e informar puntualmente de mis impresiones.

Le Zenith, París
Os dejo con esta fotografía de su Live In The City Of Light, grabado en Le Zenith de París. Espero mañana o pasado poder sacar una foto del mismo lugar... Sonando: "Don't You Forget About Me" en directo desde la Ciudad de la Luz.

lunes, agosto 15, 2005

Woody Allen, el trabajo constante y la razón meditada

¿He dicho ya alguna vez que me encanta este director? Sus comedias siempre camuflan dobles y triples lecturas que hablan de un tipo profundamente complicado, hipocondríaco, ligeramente psicótico, lleno de complejos y que se burla de sí mismo; de un tipo con una mirada comprensiva, nada superficial, quizá por todo lo anterior mucho más profunda de lo que alguien equilibrado podría llegar a hacer.

Hoy aparece una entrevista suya en El País. A destacar su experiencia en el 7-J que lo pilló rodando cerca de Londres.

domingo, agosto 14, 2005

Vertigo//2005 Tour en Barcelona

Hace una semana, Keane apareció en el escenario del Camp Nou y nos demostró ser un grupo con un futuro prometedor. Apenas una hora después Nuria, Juanma, Ana, dos de mis sobrinos y servidor empezamos la cuenta atrás. A las 21.50 de la noche, desde nuestra situación en la 3.ª grada, lateral izquierdo, vimos a Adam Clayton, Larry Mullen Jr., The Edge y Bono (quien, entre bambalinas, se paró y se giró a saludar al público) acceder al escenario.

Y, entonces, empezó una noche memorable.

Memorable en lo emotivo. Nadie puede negar que Bono es un monstruo de la comunicación de masas. Una combinación irresistible de voz desgarrada, sangre celta y carácter mediterráneo, desparpajo y rabia. La predisposición de las 81.000 almas en la catedral blaugrana también hizo mucho, realmente mucho.

Porque el concierto arrancó con el micrófono de Paul Hewson (aka Bono) mal ecualizado, y su voz no se impuso a la apisonadora rítmica de Clayton y Mullen Jr. hasta los primeros compases del "Elevation". Aun así, amor de fan aparte, la voz de Bono no daba la talla. Los agudos de "Vertigo" se perdieron, cuando no desafinó, y en verdad sonaba cansado.

Pero llegó "Elevation", y la primera estrofa la cantó sólo el público, porque no se la dejamos cantar a él; la repetimos a dúo, y sólo después entró en la banda. "Elevation" subió muy alto en el cielo de la Ciutat Comtal. Aquí Bono pareció recuperar esas fuerzas perdidas, y recapturar la fuerza de una banda cuya potencia rítmica y la sonoridad única de The Edge en la guitarra hace que escapen de ser catalogados bajo la etiqueta AOR.

Ese público... Hay que agradecer a l@s chic@s del club de fans de U2 de València sus iniciativas: repartir globos rojos y anunciar, en carteles en las afueras del estadio, la intención de cantar el "Happy Birthday" tras "Beautiful Day" (en primer intento) o "One" (en segundo) a The Edge, que el 8 de agosto cumplía 44 años. El público ya estaba entregado entonces; a partir de entonces, fue la banda quien se entregó. The Edge quieto parao en el escenario, a través de la pantalla una cara embargada de emoción y de sorpresa. Bono moviéndose como un poseso, azuzando al público.

A partir de aquí, apareció el Bono reivindicativo, quien dedicó canciones a los doctores, enfermeras y científicos que se dedican a la investigación médica ("Miracle Drug"), a su padre fallecido en el 2001 y la relación tan difícil que tuvieron ("Sometimes You Can't Make It on Your Own"), a las víctimas de cualquier atentado y a recordar que, en la lucha contra un monstruo, el terrorismo, no tenemos que convertirnos en un monstruo tan terrible o más ("Sunday Bloody Sunday"), a la coexistencia de razas y religiones ("todos somos hijos de Abraham" declaró, poniéndose un pañuelo que rezaba "Coexist", siendo la "c" una media luna islámica, la "x" sustituída por la estrella de David, y la "t", una cruz cristiana, pañuelo que acabó simbolizando una venda al acabar "Bullet the Blue Sky"), un recuerdo a la infame guerra en la antigua Yugoeslavia que dejó bien claro la desunidad europea ("Miss Sarajevo", en la que Bono se atrevió con el bridge que interpretaba Luciano Pavarotti en el disco Passengers y que hizo que las lágrimas del irlandés enmudeciesen versos de la última estrofa). Martin Luther King y su sueño, la Declaración de los Derechos Humanos y el sueño de un mundo donde no exista el hambre y se erradique la pobreza. La lista de reivindicaciones no fue exhaustiva (hay tantas cosas que arreglar en este mundo...), pero sí que es nutrida. Para mí, que musicalmente crecí con el Live Aid, los dos conciertos a favor de Nelson Mandela, es encomiable que un portavoz, un artista, acerque estos temas a un público popular, joven en su gran parte. Jamás criticaré que se pretenda concienciar a la gente, presentarle opciones, recordarles que pueden luchar. Aunque la intención del artista no sea esta, aunque utilice estos mensajes como trampolín. Cosa que, en el caso de los U2, ni es necesaria ni, a tenor de la pasión que pone Bono, parece que suceda.

Tras "Pride", la cuenta atrás del set: "Where the Streets Have No Name" y "One". Un set que no olvidó los grandes éxitos, pero que se podría calificar de conservador. Un concierto en el que Bono se dirigió más de una vez al público expresando su admiración: "wov", "unbelievable" y "you are the best" fueron las frases que más pronunció.

No se puede calificar igual, sin embargo, el primer bis: "Zoo Station" y "The Fly" devolvió a los U2 más experimentales, los más polifacéticos; desde mi punto de vista, los más interesantes. Dos canciones que tuvieron la mala fortuna de ser las únicas que acallaron en parte al público: después de canciones más viscerales, más directas, las texturas industriales de las dos canciones más señeras del Achtung Baby enfriaron al público. El primer bis lo cerró "With Or Without You", y por segunda vez el público subió más alto aún que Bono. Inolvidable.

El segundo bis fue el de la despedida de unos viejos amigos. Bono le regaló la camiseta de Ronaldinho como regalo de cumpleaños y pidió al público que volviese a entonar el "Happy Birthday". De rebote, "Yahweh" cayó para ser sustituida por "Party Girl", cosa que yo les agradezco enormemente. Y cerraron el círculo retomando el "Vertigo" con una interpretación vocal mucho más vigorosa.

Vaya, intentaba hacer una crónica breve y me ha quedado un texto más largo que raya la elegía :) Dos horas y cuarto de concierto, una noche inolvidable, una ronquera que se extendió hasta el martes. A pesar de no ser el mejor U2 de la historia (en otro post comentaré mis impresiones del How To Dismantle An Atomic Bomb), siguen siendo uno de los mejores directos del momento. A pesar de todo.

Estúpidos hombres blancos, de Michael Moore

Deslumbrado por el éxito y el buen hacer como director en Bowling for Columbine (dejando aparte la más que pausible manipulación en el montaje), me dediqué a la lectura del título con unas expectativas optimistas.

Pues nada más lejos de mis expectativas.

El ensayo no tiene por qué estar reñido con el humor; todos hemos tenido maestros en la escuela que nos han amenizado las asignaturas que nos parecían más aburridas. Manipular, recortar o irse por los cerros de Úbeda no son técnicas válidas para el objetivo de establecer una tesis sobre el tema de estudio. No ofrecer datos, sino opiniones, es un pecado capital en un ensayo, que siempre ha de destacar en rigor y claridad de exposición.

Estúpidos hombres blancos, lamentablemente, navega en las procelosas aguas de las tendencias del autor, sin ningún pudor; al contrario, alardeando, vociferando de ello. Deriva así en una repetición de gestos que, a pesar que el interfecto Bush se lo haya ganado con todo merecimiento, hace un flaco favor primero al rigor, y segundo, y más grave, a la causa que parece apoyar. Pues semejante panfleto acabará como arma arrojadiza de los Republicanos en su país para desprestigiar a los que denuncian los excesos de la administración Bush.

Volviendo a lo literario, el primer capítulo, donde Moore hace un repaso de aquellas 48 horas en que los colaboradores de Bush Jr. llevaron a cabo el pucherazo más bochornoso de la era moderna, destaca por el dinamismo y la presentación de ciertos hechos reveladores (y que provocan una situación de impotencia en el lector). A partir de la carta abierta a Bush, el libro empieza a caer, de forma cada vez más pronunciada, en los defectos antes señalados.

Por otro lado, dejando aparte los capítulos que, al lector que no viva en los States le pueden sonar a chino, la obra se deja leer con facilidad, aunque en algún punto se quede embarrado. Moore destaca por su agilidad, aunque su peculiar sentido del humor, no muy sutil precisamente, consiga que su voz rechine demasiado.

Aun así, Estúpidos hombres blancos es una forma entretenida de acercarse al pensamiento del activismo progresista estadounidense, siempre que se tenga en cuenta que estamos ante un panfleto que se pretende sardónico pero que escora demasiado la balanza hacia una visión que puede llegar a ser caricaturesca. Otras obras hay, mucho más rigurosas, que merecen la atención.

Michael Moore
Estúpidos hombres blancos
Ediciones B, col. Byblos Ensayo, núm. 2535/1
ISBN: 84-666-1768-X