Parece una entrada oportunista, y en parte tenéis razón: la ardua obtención de entradas para el concierto del Boss en Barcelona me han traído a la memoria (y al ordenador en forma de mp3) el primer disco de Bruce Springsteen que me grabaron. O quizá el segundo (es casi imposible que no me grabasen antes Born in the USA). Pero, en cualquier caso, el que dejó una marca indeleble de un tiempo, un curso y unas emociones muy concretas.
Encerrado en el estudio de mi casa, esta cinta siguió una evolución muy pareja a la del The Joshua Tree que comentaba en una entrada anterior: creo que la acabé friendo de tanta reproducción en el radiocassette del coche que presidía el fondo de la mesa. Tunnel of Love había aparecido en octubre del 87, mientras empezaba 2.º de BUP, y seguía siendo un estudiante de notas brillantes, pero más bien anodino en cuanto a la vida social.
Y a la luz del flexo, encodado sobre los apuntes, aislado del mundo, ahí había la voz de un artista que exploraba con melancolía el lado tenebroso de las relaciones humanas. Sin juzgar, sólo con una mirada sincera, y unas canciones desnudas de cualquier sobreproducción, tremendamente íntimas. Parecía sonar en la habitación, o directamente dentro de la cabeza, como un amigo, un muy buen amigo.
Aquel año fue también el año en que comencé a romper ciertas barreras: empezar a comprar mi ropa según mis criterios, a relacionarme con los compañeros del curso fuera de las aulas, a darle la patada (básicamente por incoherente y por represiva) a la Santa Iglesia Católica, a empezar a salir con amigos y amigas (con intenciones obvias... no tan obvias, guarretes :P ). Este último hecho, por cierto, motivó una persecución por parte de mis padres por las calles de Cerdanyola (no creí que fuesen capaces de intentar saciar la curiosidad por la chica rubia con la que caminaba, acompañando a otra pareja. Y mi madre, la muy ladina, después me lo contó frente a mis hermanos. ¡Cómo se llegaron a reír,, los joíos! Total, para una chica con la que al final no pasó na de na...).
Pero volvamos al estudio en semipenumbra, y a las letras de un ex camionero que, tras la engañosa jovialidad de su obra más vendida (recordad que la canción "Born in the USA", que seguro habréis coreado más de una y de dos veces en fiestas, discotecas, o en directo -dichosos vosotros-, es una amarga mirada a las consecuencias en casa de las guerras imperialistas de su país; otra canción más en su carrera sobre el lado amargo del sueño americano), se rasgaba el corazón y dejaba fluir en las letras la purulencia de una relación sentimental que tocaba a su fin. Si algo hay que reconocerle al de New Jersey es su sinceridad a la hora de sacar a relucir los aspectos más oscuros de su ser, en las antípodas de la autocomplacencia. Evidentemente, desde su puesto como estrella casi intocable del rock es mucho más fácil; aun así, pocos se atreverían, a excepción de algunos a los que no les importa engrosas las magras ventas del entorno underground. Salvo honrosas excepciones, claro. Seguro que más de uno podría recitarme artistas tortuosos superventas. O autocomplacientes que se han dado el gran batacazo.
Volvamos, volvamos al estudio en penumbra, que me disperso... Aunque mi nivel de inglés por aquella época no era para lanzar cohetes, este disco conectó conmigo a un nivel mucho más profundo que cualquier disco suyo anterior o posterior. Y, de hecho, conectó a un nivel que pocos han conseguido: poco antes, U2 con la grandilocuencia íntima de The Joshua Tree, grandes ideales para grandes ingenuos que creíamos (y aún creemos) capaces de cambiar el mundo; Arcade Fire con su Funeral, o cómo todos le daremos la mano a la Parca algún día, y once formas diferentes de afrontarlo; o Different Class, de Pulp, porque sigue habiendo lucha de clases y los humildes lo tenemos jodido para pegarnos la gran vidorra, y seguiremos batallando para darle lo mejor a nuestros hijos sacrificando nuestros sueños.
Volvamos, volvamos, volvamos al estudio, leñe. Tenemos un disco íntimo, un cantante sincero, una adolescencia sin juergas locas, sin éxito en lo sentimental, sin grandes alharacas; libros a mogollón (sobre todo de ciencia ficción; ya, típico de nerds, ¿verdad?), algunos escarceos con la escritura... Terreno abonado para la perpetua melancolía, para deseos amorosos insatisfechos, aunque la primera castaña de verdad no llegaría hasta finales del 89.
Con todo, aun a pesar de las diversas aventuras intimistas de Springsteen, desde el alabado Nebraska hasta el reciente Devils & Dust, quizá sea Tunnel of Love el más cercano a cada uno de nosotros. Pues aun viviendo felices, ¿quién no echa nunca la vista atrás a aquel/aquella ex, o a aquel amor inasible? ¿Quién no se ha refocilado alguna vez en el dolor de una ruptura o una separación?
¿Y quién no ha fingido ser feliz para hacer daño?
¿Quién no ha hecho daño? Una vez, un amigo me dijo que mi mayor miedo era hacer daño a los demás... y creo que acertó aun sin yo saberlo. Claro, esas cosas uno no lo descubre por sí mismo, que si no de qué iban a vivir los psiquiatras.
Esta canción me retrae a aquella época. Con ella vienen recuerdos del Rockopop, de las hombreras en las americanas (aún guardo un par en el armario, aunque Nuria jamás, lógicamente, me dejaría ponérmelas), de los chalecos (esos sí, aunque soy yo quien no se los pone), de las giras de Amnistía Internacional, de las primeras discotecas, de una visión del mundo ingenua... pero que aún perdura. Y espero que por mucho tiempo. Al fin y al cabo, el mundo es nuestro.
Y una canción que, please, please, please, espero que incluya en el setlist del concierto del 19 de julio en el Camp Nou. Aunque creo que, con tantas sensaciones que conlleva, romperé a llorar ahí mismo.
Brilliant Disguise
I hold you in my arms
as the band plays
What are those words whispered baby
just as you turn away
I saw you last night
out on the edge of town
I wanna read your mind
To know just what I've got in this new thing I've found
So tell me what I see
when I look in your eyes
Is that you baby
or just a brilliant disguise
I heard somebody call your name
from underneath our willow
I saw something tucked in shame
underneath your pillow
Well I've tried so hard baby
but I just can't see
What a woman like you
is doing with me
So tell me who I see
when I look in your eyes
Is that you baby
or just a brilliant disguise
Now look at me baby
struggling to do everything right
And then it all falls apart
when out go the lights
I'm just a lonely pilgrim
I walk this world in wealth
I want to know if it's you I don't trust
'cause I damn sure don't trust myself
Now you play the loving woman
I'll play the faithful man
But just don't look too close
into the palm of my hand
We stood at the alter
the gypsy swore our future was right
But come the wee wee hours
Well maybe baby the gypsy lied
So when you look at me
you better look hard and look twice
Is that me baby
or just a brilliant disguise
Tonight our bed is cold
I'm lost in the darkness of our love
God have mercy on the man
Who doubts what he's sure of
Disfraz deslumbrante
Te abrazo
mientras el grupo toca.
¿Qué eran esas palabras que susurraste, cariño,
cuando te marchabas?
Te vi anoche
en la calle, en las afueras.
Quisiera leer tu mente
sólo para saber qué tengo en esta nueva situación.
Por eso dime qué veo
cuando te miro a los ojos,
¿eres tú, nena,
o sólo un disfraz deslumbrante?
Oí a alguien llamándote
bajo nuestro sauce.
Vi algo escondido
bajo tu almohada.
Bien, lo he intentado con todas mis fuerzas, nena,
pero sólo veo
lo que una mujer como tú
está haciendo conmigo.
Por eso dime qué veo
cuando te miro a los ojos,
¿eres tú, nena,
o sólo un disfraz deslumbrante?
Mírame, mírame, cariño,
luchando por hacerlo todo bien,
pero siempre se estropea
cuando estamos a oscuras.
Sólo soy un peregrino solitario
que transita por este mundo de abundancias.
Quiero saber si es a ti en quien no confío
porque, desde luego, no me fío de mí mismo en absoluto.
Interpretas a la mujer amante,
yo haré de hombre fiel.
Pero no te fijes demasiado
en mi palma.
Subimos al altar,
la gitana nos aseguró que nuestro futuro sería brillante,
pero cuando se cierne la madrugada,
bueno, quizá la gitana mintió.
Así, cuando me mires,
mejor mírame bien y mírame dos veces,
¿ese soy yo,
o sólo un disfraz deslumbrante?
Esta noche nuestra cama está fría,
estoy perdido en la penumbra de nuestro amor.
Que Dios se apiade del hombre
que duda hasta de su sombra.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
3 comentarios:
Tunel of love és un dels grans albuns del boss. Tristesa, desamors, desenganys, solitut son els sentimens que més inspiren els poetes i ell és un dels més grans dels nostres temps.
Eli
Molt bo, l'afeigeixo al tumblelog de Barcelona blues, nen.
Hombre, gracias por el vídeo, Álex. No tengo ese disco y el otro día la añoraba (me pasé la primera mitad de 2003 escuchándola, junto con pocas más, por motivos bastante poco confesables).
Publicar un comentario